Inimputable e incorregible. Uno de los menores detenidos por el robo en el paso bajo nivel ya fue arrestado 66 veces

Uno de los adolescentes detenidos por el robo en un paso bajo nivel de la ciudad de Buenos Aires el domingo pasado en Balvanera carga con la ominosa cifra de 66 ingresos en una comisaría por haber cometido algún delito. Como es menor e inimputable por su edad, cada vez que fue detenido recuperó rápidamente su libertad.

Los adolescentes de 15 años quedaron detenidos el lunes a la madrugada luego de que un joven denunciara el robo de su celular, cerca de las 23 del domingo, en Sarmiento al 2700; fue 45 minutos después de un fallido intento de robo en el paso bajo nivel. Tras una rápida investigación, la Policía de la Ciudad confirmó que se trataba de los mismos delincuentes.

La novedad se encuentra ahora en que uno de los menores tiene un amplio repertorio de ingresos en distintas comisarías de la Ciudad. Esa cifra asciende a las 66 arrestos entre 2020 y 2024 por robos y hurtos. Pero al ser menor de edad y según lo establecido por el Código Penal, siempre recuperó su libertad y volvió al ruedo delictivo. Su última aprehensión registrada había sido el 5 de abril pasado.

Su cómplice, otro menor de edad, cuenta con cuatro ingresos registrados en dependencias policiales por el mismo tipo de delitos.

Por el último caso del intento de robo en el paso bajo nivel en Tomás de Anchorena y Perón, en la zona de Once, la causa se tramita en el Juzgado de Menores N°3, a cargo de Julia Marano Sanchis.

Los delincuentes fueron imputados y trasladados al Instituto de Menores Inchausti.

El intento de robo en Once

El asalto quedó grabado en un video que se hizo viral y sucedió cuando el motociclista se detuvo en el cruce de Anchorena y Perón, a las 22.15 del domingo.

Tres delincuentes se acercaron corriendo para intentar robarle. Cuando se dio cuenta de la situación, aceleró y logró escapar metiéndose entre los vehículos que iban más adelante.

Los ladrones emprendieron un breve trote para tratar de alcanzar al repartidor, pero en ese momento el tránsito circulaba a 24,5 kilómetros por hora y desistieron al ver que la víctima había logrado alejarse demasiado como para poder llegar hasta él.