Alberto Fernández recusó al juez Julián Ercolini, que lo investiga en la causa de los seguros

El expresidente Alberto Fernández recusó al juez federal Julián Ercolini, que lo investiga en el caso de los seguros: pidió que el magistrado sea corrido de la causa porque dijo tener un temor fundado de que será parcial y actuará en su contra.

En esta causa, Ercolini avanzó con rapidez contra Fernández tras la presentación de la denuncia y ordenó la inhibición general de los bienes del expresidente, además de un informe de sus comunicaciones. Según el exmandatario, hay elementos para creer que se trata de “una venganza disfrazada de causa penal” porque primero fueron amigos y después Fernández denunció a Ercolini por el caso Lago Escondido y pidió incluso su destitución.

La causa contra el expresidente investiga presuntas contrataciones irregulares de entes públicos con Nación Seguros. Fernández fue imputado en el caso porque firmó un decreto que modificó el régimen de esos contratos, de los que participaron brokers con comisiones sospechadas de ilegales.

En el escrito que presentó, Fernández le pidió a Ercolini que se excusara de seguir interviniendo en el caso. Si el juez se niega, le corresponderá a la Cámara Federal decidir si hace lugar a la recusación y corre al juez o lo confirma en la causa.

El expresidente es muy crítico desde hace años de Ercolini, con quien había tenido una relación estrecha porque los dos eran discípulos del exministro y exprocurador Esteban Righi, y profesores de su cátedra en la UBA. Fernández acusó a Ercolini de haber actuado con intencionalidad política en sus investigaciones contra el kirchnerismo y en 2022 lo denunció por el viaje a Lago Escondido que Ercolini compartió con otros jueces, directivos del Grupo Clarín, el entonces ministro de Justicia de la Ciudad y un exespía.

Fernández hace mención en su escrito a su conocimiento de décadas con Ercolini. “La vinculación no fue la de meros ’conocidos’ de la facultad sino que, también durante años, y al menos desde mi perspectiva (y de lo que cualquier tercera persona podría considerar) hemos mantenido una extensa y muy cercana relación de amistad, estrecha”, sostiene el expresidente, que cuenta cómo ese vínculo se rompió.

Fernández recordó que “muchas veces” descalificó públicamente el accionar del juez, pero dijo que en su recusación se concentraría sólo en el caso Lago Escondido, “por la difusión que tuvo el escándalo, por la formación de procesos judiciales específicos y por la investidura presidencial que entonces tenía”.

Recordó que en ese caso él instruyó a sus funcionarios para que denunciaran a Ercolini por presuntos hechos de corrupción que, afirmó, “ni siquiera habrían sido desmentidos”. Lo que el expresidente le cuestiona al juez no es solo el viaje en sí, sino las presuntas maniobras para esconder ese viaje que salieron a la luz cuando se difundieron unos chats que la justicia federal declaró que no podían ser considerados como prueba válida. La causa contra Ercolini y sus compañeros de viaje al Sur había avanzado en Bariloche, pero con Mariano Cúneo Libarona (hoy ministro de Justicia) como abogado, otro de los jueces investigados -Pablo Yadarola- logró que el expediente pasara a los tribunales de Comodoro Py, donde se cerró sin que la fiscalía apelara, en diciembre pasado, al filo de la feria judicial.

Hasta hoy, pese a estar imputado, Fernández había decidido no presentarse en el expediente. Ahora lo hizo y presentó como abogada a Mariana Barbitta, que fue defensora de César Milani, exjefe del Ejército durante el gobierno de Cristina Kirchner, y de los tripulantes venezolanos del avión de Emtrasur que quedaron retenidos en la Argentina en una causa por presunto terrorismo en 2022.